En entradas pasadas hemos usado el término de atenuación, pero ¿Qué es? ¿Qué significa y como afecta a mi enlace de fibra óptica?
La atenuación es la pérdida de potencia de señal óptica en una fibra y se expresa en decibeles (dB). Entre mayor sea la atenuación la longitud del enlace queda limitada.
La pérdida o atenuación puede ser causada por factores intrínsecos y extrínsecos.
Intrínsecos: Son todos los factores que se refieren al proceso de fabricación de la fibra como puede ser impurezas en el vidrio, parámetros geométricos (núcleos ovalados), los materiales con los que está construida la fibra pueden absorber o dispersar parte de la luz.
Extrínsecos: Son los factores externos que vamos agregando a la fibra, como defectos de instalación, macro y micro curvaturas, acoplamiento de fibras erróneamente, suciedad en conectores y empalmes, splitters, atenuadores, entre otros.
Todos estos factores van consumiendo potencia la señal, de hecho, ya de por sí cada kilómetro de fibra cuenta con una pérdida por kilómetro que debe ser tomada en cuenta cuando realizas un presupuesto de pérdida óptica.
Cada evento agregado al enlace de fibra óptica va sumando atenuación y va restando potencia óptica. Hoy en día contamos con estándares que nos brindan los valores permitidos para cada uno de estos eventos, por ejemplo, un empalme por fusión debe ser de aproximadamente 0.1 dB para ser considerado como normal o dentro de los parámetros, la unión de dos conectores es de 1 dB, pero estos valores van a depender de la longitud de onda, ya que en cada una hay distinta sensibilidad según el fenómeno o evento.
Cabe mencionar que todos los enlaces de comunicaciones y conexiones sufren atenuación, no es exclusivo de la fibra óptica; sin embargo, la atenuación en un enlace de fibra es menor a un enlace inalámbrico o de cobre, es por ello por lo que la fibra óptica ha tenido presencia en enlaces de larga distancia.
